14 ene 2024

Un mejor tu

Otro post viejito de traceurproject.com





Hoy platicaba con una amiga que me pidió que le enseñara Parkour. Ha pasado tiempo desde que le enseñé algo de Parkour a alguien, así que no supe si quería enseñarle o no. Sin embargo, durante este tiempo de no enseñar he tenido la oportunidad de entrenar por mi cuenta, de ser estudiante en una que otra clase y de mantener mis ojos y mis oídos abiertos. Así que me dí cuenta que realmente quería saber por qué le dieron ganas de aprender nuestra disciplina y tal vez compartir con ella algo de mi experiencia. Ya sabes, para que se entere de que se trata esto.

Cuando le pregunté por qué quería aprender Parkour, su respuesta fue mucho más elaborada de lo que yo esperaba, como si ella hubiera estado pensando en esto por un tiempo. “Bueno, pues porque es un deporte cool y porque de verdad me gusta como me siento libre y poderosa cuando corro, y se siente como que es algo que quiero hacer porque me haría sentir mucho más capaz de lo que soy. Se ve como que es divertido, mucho trabajo y además quiero tener un objetivo por el cual trabajar”.

Me encantó el que pudiera verse “libre” al aprender Parkour, y también el que vea a los practicantes de Parkour como gente fuerte y capaz, así que quise saber más de lo que había en su mente. Quise saber qué es lo que ella pudiera haber estado esperando obtener de esta disciplina. “¿Y qué es ese objetivo por el cual te gustaría trabajar?” pregunté: “¿Hablando en general?” contestó, “ser fuerte, brincar, escalar y correr por la ciudad y el bosque. No tengo nada específico. Sólo quiero algo con que empezar. Quiero que se convierta en mi nuevo hobby”.

Como mencioné anteriormente en otro post, la gente se acerca al Parkour por razones muy diferentes, tal vez haya tantas razones como hay practicantes. Pero últimamente he visto más y más niños o jóvenes empezar su práctica sin tener la más mínima pista de qué es de lo que esto realmente se trata. No estoy hablando de ninguna tontería de “PK vs FR”. Me refiero a la esencia, a la filosofía que se diluye más rápido que nunca como Blane mencionó en su página hace algunos años. Se me ocurrió que me daría el chance de compartir con ella mi propia idea de lo que es el Parkour, lo que significa para mí y como me desarrollé como Traceur. Sin la intención de forzarla a creer en algo o en lo otro, simplemente pensé “ey, si le voy a estar enseñando, más le vale que sepa en lo que se está metiendo. En cualquier momento puede irse a aprender de alguien más si no le gusta mi visión”. Pero se me olvidó que a veces se me reconoce por ser un hombre un tanto apasionado. Y así, empezó el monólogo.

“Lo ‘Cool’ del Parkour”, le dije, “es que es mucho más que sólo brincar por todos lados; mucho más que aprender formas divertidas de mover tu cuerpo y mucho más que aprender como jugar con cualquier obstáculo que tengas alrededor. Parkour es acerca de encontrar tus límites físicos, mentales y espirituales, y romperlos cada vez que entrenas, cada sesión, cada día”. Ella sólo me miraba sin decir palabra, así que seguí hablando.

“Parkour se trata de convertirte en un mejor ser humano, más fuerte, más ágil, con más enfoque y más humilde. Mejor que lo que eras el año pasado, mejor que ayer, mejor que el brinco pasado, mejor que la última lagartija”. Empecé a respirar más agitado. “Parkour es el arte de la superación personal a base de aprender como lidiar con obstáculos”. Ella abrió grandes sus ojos. “Cuando empiezas a entrenar, y si te comprometes, te vuelves más fuerte… Mucho más fuerte! No sólo de brazos y piernas, sino más fuerte en tu mente, en tu espíritu. Es decir, si yo puedo superar cualquier obstáculo físico que me encuentre, que me impide de ser capaz de negociar con mi jefe, de pasar mis examenes, o de ser un mejor hijo, tío, hermano?"


“Empiezas a entrenar y después de un tiempo te das cuenta de que no sólo eres más fuerte que tu antiguo Yo. Empiezas a ser más fuerte, más ágil, más hábil y más estable que la gente a tu alrededor. Te das cuenta entonces que puedes de hecho ayudar a esa gente. Te das cuenta que tu fuerza se convierte en algo útil para tu comunidad. Te vuelves fuerte para ser útil”. Me detuve por un segundo. “ese es nuestro lema. Y la única forma de lograrlo es entrenando. Entrenando inteligentemente”.

“Inteligentemente?”, preguntó. “Sí”, le dije, “porque si eres descuidada o tomas riesgos innecesarios y te lastimas, si te rompes, entonces ya no hay un Tú fuerte. No hay más fuerza que compartir. Ya no eres útil para tu gente. Tienes que ser, y tienes que durar. Ser fuerte, durar fuerte. Por tu propio bien y por el bien de los que te rodean. Eso es Parkour”.

Vaya que estaba emocionado, así que continué “Se convierte en mucho más que sólo un hobby. Se convierte en una forma de vida. Te conviertes en un Traceur, trazas tu propio camino, decides tu propia vida. Sonríes más y entrenas más fuerte. El miedo se convierte en tu amigo. El dolor se convierte en tu amante. No habrá crema o loción que pueda volver a hacer tus manos suaves otra vez porque ahora son duras. Son fuertes. Son tan duras y tan fuertes como toda tú eres ahora”.

“Incluso si no estás “brincando” todos los dias, si te mantienes fuerte para tí y para la gente a tu alrededor, si eres humilde y tratas a tu máximo para ser mejor de lo que eras antes, entonces sigues entrenando, sigues mejorando. Vives Parkour todos los días en todo lo que haces”.

“¿Y que hay de la adrenalina y de lo emocionante que se ve?” Preguntó mi amiga.

“¿Adrenalina?” Dije, “Seguro! Pero no es más que la cereza de un pastel de felicidad y bienestar. ¿Se ve emocionante? ¡Desde luego! ¡Se siente incluso mejor! Pero realmente ya no te importa lo que la gente diga o piense de la forma en la que te mueves y vives tu vida. Porque no eres un stunt, no eres un payaso, no estás aquí para divertir y entretener a la gente. Estás aquí para entrenar. Estás aquí para ser más fuerte. Estás aquí para convertirte en un mejor Tú”. Me detuve por un segundo.

Ella sonrió y me miró a los ojos “¿Y cuándo empezamos?” preguntó.

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